Para facilitar el estudio, junto con las mencionadas prestaciones, cuatro de las habitaciones disponen de dos espacios: una zona de descanso y otra de trabajo.
Uno de los espacios más emblemáticos de la Casa de Europa es una amplia galería donde la luminosidad, el diseño y las líneas más limpias y austeras se alían para crear un lugar idóneo para los momentos de tranquilidad. Puede utilizarse también para comidas de trabajo o institucionales.
Junto con las habitaciones y la galería la casa dispone de dos pequeños salones sociales y una sala de reuniones equipada con una mesa imperial con capacidad máxima para 12 personas.
En la fachada norte la casa tiene añadida una pequeña capilla con acceso directo desde el interior de la propia casa y con una balconada sobre ella en el primer piso. En ella se encuentra un excelente retablo barroco magníficamente conservado.