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En la espectrometría de emisión óptica con plasma acoplado inductivamente (ICP-OES), la muestra es normalmente transportada al interior del aparato como una corriente líquida que se convierte en un aerosol mediante el proceso conocido como nebulización.

La muestra, en forma de aerosol, se transporta al plasma, donde es desolvatada, vaporizada, atomizada y excitada y/o ionizada por el plasma. Los átomos excitados y los iones emiten su radiación a una longitud de onda característica. Esta radiación es detectada y se puede convertir en información sobre concentración.

El ICP-OES dispone de dos tipos de nebulizadores: Low-Flow (para muestras en general) y ultrasónico (para agua); así como de dos tipos de cámaras de spray: Scott y ciclónica.

Las muestras deben estar en disolución y convenientemente filtradas. La cantidad de muestra necesaria para el análisis dependerá del número de elementos que se desee medir, pero por norma general son suficientes entre 10 y 15 mL.

Los contenidos de esta página se actualizaron el 12.04.2024.