El servicio cubre todo el espectro de sustancias de abuso de interés en nuestro medio como el alcohol etílico, cocaína, cannabis, opiáceos (morfina, codeína, etc.), anfetaminas y drogas de síntesis, así como algunos fármacos de abuso como pueden ser las benzodiacepinas y los antidepresivos. Se incluyen, además, sus principales metabolitos.
Debe ponerse en contacto con nosotros a través de este email, para que le proporcionemos las directrices para seguir.
El mechón necesario para completar el análisis debe tener el grosor aproximado de un lápiz y deber ser cortado, preferentemente, de la zona occipital.
Por norma general, los análisis de cabello estarán disponibles en dos semanas desde la recepción de la muestra.
El pelo es una matriz complementaria a la sangre o a la orina en cuanto al período de detectabilidad de las drogas, ya que está limitado solo por la longitud del mechón estudiado. Dado que se estima que el cabello crece a una longitud media de 1 cm/mes, la información proporcionada puede ser de meses o años de consumo, pudiendo así obtener un perfil cronológico de drogadicción, estableciendo, al mismo tiempo, un patrón de severidad del consumo de drogas.
Disponemos de un inmunoensayo para efectuar el screening toxicológico y, como técnicas de confirmación, la cromatografía de gases ajustada a espectrometría de masas.