Pasar al contenido principal

Mentora: cuando las raíces del rural se convierten en escuela de futuro

E equipo creador de Mentora tiene un fuerte componente multidisciplinar
E equipo creador de Mentora tiene un fuerte componente multidisciplinar
El proyecto, que reivindica el conocimiento intergeneracional, acaba de recibir el tercer premio en el Terra Creative Jam 2025

En un tiempo en el que muchas tradiciones del campo gallego corren el riesgo de desaparecer, el proyecto Mentora propone un giro inspirador: convertir a las personas mayores del rural en maestras de saberes agrícolas, ganaderos y comunitarios.

La idea, que combina innovación social, educación vivencial y respeto por la tierra, acaba de recibir el tercer premio en el Terra Creative Jam 2025, el evento de creatividad e innovación organizado por el Campus Terra de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) y la incubadora Lug Open Factory.

Durante dos intensos días de trabajo colaborativo, los equipos participantes en esta edición afrontaron el reto de «reinventar el rural», buscando soluciones que conectaran sostenibilidad, tecnología y comunidad.

Interconexión generacional

En ese contexto nació Mentora, un proyecto que pone el foco en la interconexión generacional, reivindicando el valor del conocimiento que guardan quienes han trabajado la tierra durante toda una vida.

«Decidimos poner en el centro del proyecto al abuelo y la abuela del rural, que tanto han hecho por nosotros», explican los creadores del proyecto. «Nos pareció una buena idea darles el protagonismo que se merecen y también la ayuda y compañía, porque muchos montes comunales y propiedades quedan abandonadas, ya que las personas mayores que los cultivaban o cuidaban ya no pueden hacerlo solas».

De esa reflexión nació una propuesta con un fuerte componente pedagógico y vivencial, que busca transformar la experiencia agrícola y ganadera en una fuente de aprendizaje práctico y emocional. «El conocimiento es poder, y en las personas mayores reside una gran fuente de sabiduría, valores y conocimientos fundamentales que tienen que ver con nuestros orígenes», afirman.

Tradición y aprendizaje compartido

El equipo de Mentora imagina un futuro en el que el campo se convierte en un aula abierta: fincas y aldeas como espacios de encuentro entre generaciones.

A través de talleres breves y prácticos, las personas mayores enseñarán a participantes urbanos —jóvenes, familias o curiosos— actividades ligadas al calendario agrícola y ganadero: desde sembrar y preparar el suelo, elaborar compost o recoger patatas, hasta cocinar recetas tradicionales o aprender técnicas de poda e injerto de frutales y viñas.

En el ámbito ganadero, la propuesta incluye experiencias como pastoreo con ovejas, manejo de rebaños o adiestramiento de perros de trabajo. «Queremos unir la sabiduría y la experiencia de nuestros mayores del campo con la curiosidad de jóvenes y familias de ambientes más urbanos, creando sinergias y encuentros beneficiosos para ambos», resumen los impulsores de Mentora.

El impacto social de esta propuesta va más allá del aprendizaje práctico. «Recuperar estos saberes devuelve autonomía y sentido de origen», señalan. 

Reduce la brecha campo-ciudad, refuerza la soberanía alimentaria y transforma la tradición en hábitos útiles y actuales. Conecta comunidad y territorio».

Un equipo diverso con una misma raíz

Mentora es fruto del trabajo conjunto de cinco personas de distintas procedencias que se conocieron durante el Terra Creative Jam:

  • Esteban Lerez Proveído, ingeniero industrial especializado en mecánica, dedicado al diseño de brazos hidráulicos para labores subacuáticas.
  • Verónica Fonterosa Frías, pedagoga por la USC y asesora educativa, con formación en gestión cultural y terapias artísticas.
  • Damián Pintos, ingeniero en robótica y miembro del CSIC, con experiencia en investigación marina y campañas oceanográficas.
  • Álvaro Mena Herrera, graduado en Robótica por la USC y estudiante del Máster en Robótica e Inteligencia Artificial en la Universidad de León.
  • Jairo Muñoz García, estudiante de Robótica y programador.

Pese a su diversidad profesional, todos comparten un mismo propósito: reconectar generaciones a través del saber rural. «Creemos que uno de los fuertes de Mentora es su componente social y comunitario. Nos parece todo un reto, pero ahí está también su importancia: darle cabida a este tipo de proyectos en un contexto que necesita nuevos impulsos», explican.

Del hackathon al territorio

El equipo reconoce que el paso por el Terra Creative Jam ha sido una experiencia reveladora. «Nos llevamos grandes aprendizajes. En apenas dos días y medio conseguimos sacar adelante un prototipo de proyecto, aprendiendo a ir al núcleo de las ideas y evitar el sobre-diseño. Fue una oportunidad única para experimentar, crear y conectar».

El siguiente paso será poner en marcha un piloto local, con alianzas en el territorio y talleres estacionales, para comprobar sobre el terreno el impacto de esta idea. «Queremos empezar poco a poco, escuchando al rural y adaptándonos a su ritmo. Ya os contaremos», adelantan entre sonrisas.

Porque, al fin y al cabo, Mentora no solo quiere rescatar lo que se está perdiendo: quiere sembrar futuro con raíces de sabiduría.

Los contenidos de esta página se actualizaron el 03.12.2025.