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Discurso de Klaus von Gadow

Lección doutoral de Klaus von Gadow na súa investidura como Doutor Honoris Causa en Filoloxía

Momento do discurso de Klaus von Gadow
Momento do discurso de Klaus von Gadow

Agradezco este gran honor de contribuir a la tradición académica de la Universidad de Santiago de Compostela, que, con sus más de 500 años, es una de las universidades más antiguas y reconocidas del mundo. Es para mí una gran satisfacción que esta ceremonia tenga lugar en el campus universitario de Lugo.

En los años noventa del siglo pasado, la Universidad de Göttingen me animó a realizar un sabático fuera de Alemania. La pregunta era: ¿a dónde ir? Conocía el mundo anglosajón, pero nunca había estado en España.

Un colega de la universidad de Lisboa me comentó que tres jóvenes profesores de Madrid se acababan de incorporar a una nueva facultad forestal en Lugo. Estos tres profesores eran Alberto Rojo, Roque Rodríguez y Juan Gabriel Álvarez.

Marga, la mejor y más solidaria crítica de mi trabajo durante los últimos cincuenta años, y yo pasamos un feliz y muy productivo sabático de cinco meses aquí en Lugo. Conocimos los montes de Galicia, aprendimos un nuevo idioma, apreciamos la cultura hispano-celto-romana y degustamos pulpo cocido al estilo gallego. Esta visita abrió numerosas colaboraciones con colegas de España, Alemania y México. Fue un punto de inflexión en nuestra vida.

Aparte de la filosofía y la astronomía, el estudio de los montes arbolados representa una de las ciencias más antiguas. En 1713 Hans von Carlowitz publicó su libro Sylvicultura oeconomica. En esta obra aparece el primer registro escrito de la palabra sostenibilidad, clave de cualquier decisión tomada hoy en día, no solo en el ámbito forestal, sino en muchos otros. En esta obra, von Carlowitz enfatizó la necesidad de asegurar la continuidad a largo plazo de cualquier recurso natural. La sostenibilidad es buena idea pero su implementación no es tan fácil.

La base de todo esfuerzo científico es la observación. A través de su cuidadoso estudio de los planetas, los griegos establecieron la base de la astronomía. Nosotros hacemos lo mismo: observamos cómo los árboles responden a las variaciones de sitio y a los cambios de densidad, estructura y diversidad; cómo responden a los incendios y a las plagas. Los árboles son organismos de larga vida, por lo tanto debemos observarlos durante períodos de tiempo prolongados.

Los países de Europa tienen una larga tradición en el mantenimiento de parcelas de campo. Algunas de ellas se han observado durante más de un siglo, permitiendo el estudio de los efectos del cambio climático, hoy más importante que nunca. Aunque algo más hace que las parcelas terrestres sean indispensables: se usan métodos de teledetección para medir los árboles. Pero el Lidar, los satélites o los drones no pueden identificar las especies. Las especies, la biología de una comunidad forestal son clave para su capacidad de adaptarse. Por ello sí necesitamos parcelas de campo.

Tuve la gran suerte de recibir varias invitaciones para continuar con la investigación en diferentes ecosistemas del mundo. Se han establecido nuevas redes de observación en regiones fuera de Europa. Un ejemplo es la red en el estado mexicano de Durango, otras se estan desarrollando en China y en India. La gran red de observación mexicana del Dr. Corral Rivas en la Sierra Madre Occidental proporciona información esencial sobre la relación entre la densidad forestal y la producción de biomasa. Este resultado muy importante sólo es posible obtenerlo de estudios observacionales de campo. La red de observación en China, del Dr. Zhao Xiuhai, representa una nueva, enorme y valiosa infraestructura para el estudio de los principales biomas forestales en este gran país. La red incluye los bosques templados mixtos del noroeste de China, los bosques pino-encino al sur de Mongolia, las comunidades de alta diversidad de Shaanxi y Gansu, los bosques tropicales de Jiulianshan, y el cinturón de los bosques desde la provincia Sichuan hacia Xinjiang.

Hemos realizado también varios estudios piloto en India, en Assam y Himachal Pradesh, en Rajestan y Karnataka. El gobierno indio está estableciendo una red de parcelas integrada con el inventario forestal nacional, cubriendo una gran variedad de ecosistemas en este enorme país.

Los procesos que tienen lugar en los bosques requieren de mucho tiempo para permitir una interpretación con suficiente confianza. Por esta razón, las parcelas permanentes, una vez establecidas, representan un tesoro inestimable que requiere la investigación conjunta de diferentes disciplinas.

Durante mucho tiempo, el mundo de la ciencia ha estado involucrado en un proceso progresivo de diferenciación. Este proceso ha llevado a la formación de una gran variedad de disciplinas, cada una con un conjunto específico de métodos, terminologías y plataformas de publicación.

Más recientemente, a través de la comunicación rápida, las redes globales y la tecnología, ha surgido una nueva era de síntesis que ha suavizado y difuminado la segregación y la encapsulación de las disciplinas.

Un ejemplo de esta tendencia es la política editorial de la revista Forest Ecosystems. Nuestro consejo editorial incluye miembros de una gran variedad de disciplinas. La alta diversidad de los manuscritos que recibimos es un indicador más de la creciente demanda para la integración y síntesis de las disciplinas. Las ciencias integrativas, como la ecología, ocupan una posición cada vez más fuerte dentro de la familia de las ciencias.

Hoy en día, una de las preguntas fundamentales es: ¿cómo podemos proteger este frágil mundo de nuestro propio poder destructivo?. Solo el 71% de la superficie terrestre del planeta se define como habitable. Los humanos usan la mitad de esta área para la producción agrícola. Del resto, el 37% está cubierto de bosques; el 11% de arbustos y el 1% se utiliza como infraestructura urbana.

Tal como se ha mencionado, el 50% de la superficie habitable de nuestro planeta está utilizada por la agricultura. Necesitamos la agricultura industrializada para alimentar a la enorme población humana. Por ello, muchos bosques representan el último refugio en el que podemos todavía encontrar suelos y aguas subterráneas relativamente libre de contaminación.

Para mantener la viabilidad y la resiliencia de los ecosistemas forestales se requiere una gestión pro-activa. Según recientes investigaciones una gestión prudente puede tener efectos positivos. En contra de los supuestos generales, se encontró una alta biodiversidad de la flora herbácea, en musgos, líquenes y hongos de madera en los bosques gestionados. En contra de los supuestos generales, se encontró más madera muerta en estos bosques en comparación con los protegidos. La protección, basada en ideas románticas, puede tener consecuencias inesperadas. Por ejemplo, sin una gestión adecuada, los bosques de Białowieża en Polonia, afectados por el escarabajo Ips typographus, necesitarán mucho tiempo para recuperarse.

En los últimos años hay cada vez más evidencia de que la mayoría de los bosques considerados primarios han sido objeto de un uso extensivo. Los bosques de Białowieża, aclamados como vírgenes, y muchos otros, incluidos los bosques de la Amazonia, en efecto han sido sometidos a un uso humano, a veces a gran escala, no solo por la madera, sino también por la introducción de organismos en áreas que están fuera de su rango natural. Por tanto, la mayoría de los ecosistemas forestales contemporáneos son novedosos, forman una gran parte de la biosfera, y es probable que tengan una mayor expansión.

Marris proclama en 2013 que estos ecosistemas novedosos son la nueva normalidad y sugiere aceptar esta nueva realidad. Lo cierto, es que hemos convertido los biomas originales en ecosistemas antropogénicos, denominados antromas.

Una gran parte de Galicia está cubierta por estos nuevos ecosistemas. Seguramente se necesita investigación para establecer un equilibrio entre la productividad y la resiliencia de los ecosistemas novedosos.

México ha sido una verdadera revelación para mí. Especialmente los bosques de la Sierra Madre Occidental que representan un sistema socio-ecológico único. Una cuestión delicada que se debate mucho es si estos bosques únicos deben ser reemplazados por plantaciones industriales o si deben seguir siendo utilizados selectivamente por los propietarios, tal vez de una manera más adecuada. Numerosos estudios han demostrado que los ecosistemas más resilientes son aquellos que incluyen múltiples especies. La Sierra Madre Occidental es un mundo único con muchas oportunidades para la investigación.

De repente, nuestro mundo se ha vuelto muy pequeño. La investigación de paisajes arbolados no se limita a una región en particular, se ha convertido en global. La comunicación, el clima, la economía, el estudio académico y la investigación, son todos globales.

Excelentísimo Sr. Rector: me encanta ver lo visibles internacionalmente que son mis colegas del campus de Lugo. Se han convertido en líderes internacionales en varias áreas de investigación de los ecosistemas forestales. Lugo ha avanzado hasta ser un centro científico ampliamente reconocido en el mundo. Este honor que hoy recibo es un gran signo de aprecio de nuestra investigación. Les deseo a todos que disfruten mucho en su vida académica. Vivat, crescat floreat la Universidad de Santiago de Compostela.